
Aunque no a todos, pues los equipos de "bajo coste" que han tenido tanto éxito, podrán tener XP hasta el 2010, ya que seria imposible correr en estos equipos el Windows Vista, por los grandes requerimientos de hardware que nenecita para funcionar.
Ante nuevas presiones para que retrasase esa fecha, Microsoft ha decidido no hacerlo, pero permitirá que los usuarios de ordenadores más baratos sigan usando ese software.